#010 ¡Quedan esperanzas en el Padel!
Esta semana me vi obligado a bajar un poco la intensidad con mis partidos de Padel, lamentablemente el cuerpo me recordó mis 36, y tras una semana (la pasada) en la que jugué 6 veces, tuve que aflojar producto de un dolor grande en la muñeca derecha.
Me limité a 3 días esta semana (tampoco voy a dejar de jugar, che!), y me tuve que bajar de un torneo. Tengo miedo de pasarme de rosca y terminar pagándolo caro.
De todos modos, el ritmo que le vengo metiendo me ilusiona, ya no me agito tanto en el 3er set (o mejor dicho, no se me sale el corazón por la boca, que ya es un gran paso).
Hace unos días me escribió Diego, de Misiones, entre otras cosas que me contó acerca de lo parecido de nuestras historias y me dijo textualmente: "me encantó leer lo tuyo, y decidí bajar de peso para volver al padel". PIEL DE GALLINA!! Cuando hace más de un mes se me ocurrió la locura esta de contar lo que me estaba pasando, ni loco soñé la repercusión. Más allá de las 15.000 visitas que llevamos en el blog, un mensaje como el de Diego, le da sentido a todo. El año pasado, me vi medio obligado a bajar 10 kilos para mejorar mi salud, y esos 10 kilos representaron mucho mas que un número en la balanza. Por eso mismo, un mensaje como este me moviliza groso. El sólo leerlo me emocionó y nada deseo más que pueda lograrlo y ser, en algo, parte de eso. Si esta locura (inconsciente) logra ayudar a uno solo de los lectores a mejorar en algo su vida, habrá superado con creces la expectativa inicial del blog.
Yendo al Padel, sigo buscando espacios donde jugar, que me queden cerca de casa y que se acomoden un poco mejor a mis horarios.
Quienes están transitando el mismo camino que yo (que por lo que noto al recibir los mensajes privados de Facebook, somos varios) saben lo que es padecerlo. Y cuando encontramos una cancha cerca y con horarios compatibles, resulta que "dibujan" las categorías. Igualmente no me rindo y sigo buscando.
Esta semana me llevé una MUY GRATA sorpresa. Buscando clubes de Padel, entre los tantos que llamé, di con uno que organiza canchas libres en días y horarios en los que puedo. El organizador me pidió mi teléfono para "explicarme" el funcionamiento. Pensé para mis adentros: "¡Este se cree que soy bol*** y no se lo que es una cancha libre!", y le dí mi teléfono (obviamente) porque sino no me pasaba info.
A este "actor" vamos a ponerle nombre, porque lo merece y porque creo que estaré bastante en contacto con él. Para este blog, su nombre será Tom.
La grata sorpresa con la que me encuentro al recibir la explicación de Tom, es que para poder participar de las canchas libres que organiza, me pide que vaya en cualquier momento a pelotear 15 minutos con él. De esa manera, analiza mi nivel de juego y me ubica con otros jugadores de nivel similar, más allá de la categoría que cada uno DICE tener. GUAUUUUU!!
Me costó creerlo pero fui, y así se hizo. HAY ESPERANZAS muchachos y muchachas, queda gente seria en este deporte, que resignan un rato de su tiempo, para hacer las cosas bien!
Después del peloteo charlamos un rato. Hasta filosofamos un rato incluso, acerca de las diferentes categorías y cómo un jugador de 6ta en un club, es considerado 7ma en otro y 5ta en otro. Un poco basado en la necesidad económica del club (o del organizador) es que levantan o bajan el nivel de la categoría para tener mas parejas anotadas en las actividades que organizan.
El caso es que, la actitud de Tom, al no ser algo habitual, creo que amerita dedicarle un episodio. Y después de ir varias veces a comprobar que todo sea como parece ser, no dejaré de dar el nombre real y recomendarlo, porque siendo pocos, creo que estoy obligado a compartir el dato. De todos modos, no todo lo que brilla es oro, asique me tomaré un tiempo para comprobarlo y en caso que no sea cobre ni bijouterie, haré la recomendación pertinente.
Capaz, algún día podamos armar una comunidad y tener una "lista de buena fe", para ir rotando entre clubes de Padel que, sin dejar de lado su negocio, pongan como foco a los clientes.
Me limité a 3 días esta semana (tampoco voy a dejar de jugar, che!), y me tuve que bajar de un torneo. Tengo miedo de pasarme de rosca y terminar pagándolo caro.
De todos modos, el ritmo que le vengo metiendo me ilusiona, ya no me agito tanto en el 3er set (o mejor dicho, no se me sale el corazón por la boca, que ya es un gran paso).
Hace unos días me escribió Diego, de Misiones, entre otras cosas que me contó acerca de lo parecido de nuestras historias y me dijo textualmente: "me encantó leer lo tuyo, y decidí bajar de peso para volver al padel". PIEL DE GALLINA!! Cuando hace más de un mes se me ocurrió la locura esta de contar lo que me estaba pasando, ni loco soñé la repercusión. Más allá de las 15.000 visitas que llevamos en el blog, un mensaje como el de Diego, le da sentido a todo. El año pasado, me vi medio obligado a bajar 10 kilos para mejorar mi salud, y esos 10 kilos representaron mucho mas que un número en la balanza. Por eso mismo, un mensaje como este me moviliza groso. El sólo leerlo me emocionó y nada deseo más que pueda lograrlo y ser, en algo, parte de eso. Si esta locura (inconsciente) logra ayudar a uno solo de los lectores a mejorar en algo su vida, habrá superado con creces la expectativa inicial del blog.
Yendo al Padel, sigo buscando espacios donde jugar, que me queden cerca de casa y que se acomoden un poco mejor a mis horarios.
Quienes están transitando el mismo camino que yo (que por lo que noto al recibir los mensajes privados de Facebook, somos varios) saben lo que es padecerlo. Y cuando encontramos una cancha cerca y con horarios compatibles, resulta que "dibujan" las categorías. Igualmente no me rindo y sigo buscando.
Esta semana me llevé una MUY GRATA sorpresa. Buscando clubes de Padel, entre los tantos que llamé, di con uno que organiza canchas libres en días y horarios en los que puedo. El organizador me pidió mi teléfono para "explicarme" el funcionamiento. Pensé para mis adentros: "¡Este se cree que soy bol*** y no se lo que es una cancha libre!", y le dí mi teléfono (obviamente) porque sino no me pasaba info.
A este "actor" vamos a ponerle nombre, porque lo merece y porque creo que estaré bastante en contacto con él. Para este blog, su nombre será Tom.
La grata sorpresa con la que me encuentro al recibir la explicación de Tom, es que para poder participar de las canchas libres que organiza, me pide que vaya en cualquier momento a pelotear 15 minutos con él. De esa manera, analiza mi nivel de juego y me ubica con otros jugadores de nivel similar, más allá de la categoría que cada uno DICE tener. GUAUUUUU!!
Me costó creerlo pero fui, y así se hizo. HAY ESPERANZAS muchachos y muchachas, queda gente seria en este deporte, que resignan un rato de su tiempo, para hacer las cosas bien!
Después del peloteo charlamos un rato. Hasta filosofamos un rato incluso, acerca de las diferentes categorías y cómo un jugador de 6ta en un club, es considerado 7ma en otro y 5ta en otro. Un poco basado en la necesidad económica del club (o del organizador) es que levantan o bajan el nivel de la categoría para tener mas parejas anotadas en las actividades que organizan.
El caso es que, la actitud de Tom, al no ser algo habitual, creo que amerita dedicarle un episodio. Y después de ir varias veces a comprobar que todo sea como parece ser, no dejaré de dar el nombre real y recomendarlo, porque siendo pocos, creo que estoy obligado a compartir el dato. De todos modos, no todo lo que brilla es oro, asique me tomaré un tiempo para comprobarlo y en caso que no sea cobre ni bijouterie, haré la recomendación pertinente.
Capaz, algún día podamos armar una comunidad y tener una "lista de buena fe", para ir rotando entre clubes de Padel que, sin dejar de lado su negocio, pongan como foco a los clientes.
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