#007 El Padel es un deporte de equipo
Hay un elemento en el Padel que lo hace casi único, el deporte se practica en pareja. Si bien no es el único, no son muchos los deportes de equipo en los que sólo hay dos integrantes. (Ok, no estoy descubriendo la pólvora, pero síganme en la idea...)
Al ser un equipo de sólo dos personas, se hace más evidente la falla de uno de los integrantes, con que uno de los jugadores tenga un "mal día", el 50% del equipo va para atrás. (Y acá nacen las grandes discusiones y las excusas del tipo "perdí por culpa del muerto de mi compañero")
Por lo general, los deportes en equipo, suelen contar con varios integrantes, y si bien cada uno de los jugadores tiene un rol importante dentro del funcionamiento del todo, muchas veces el conjunto puede salvar un "mal día" individual.
Cuando jugaba al Voley tuve infinidad de días malos (de hecho, me cuesta recordar algún día bueno!), en los que el equipo me cubría, o el entrenador me sacaba de la cancha por un rato para evitar exponerme en alguna posición de la cancha y volverme a poner con otra rotación.
Este domingo me anoté nuevamente en un Torneo de Padel de 7ma (sigo sin encontrar alguno de 8va). Con el mismo resultado que el torneo de la semana pasada (ver Episodio 6), pero con el agravante de que tuve un pésimo día. Esos días en los que nada sale, en los que podría haber jugado con Paquito Navarro como compañero y aún así se iba a complicar ganar un game (encima jugaba por primera vez con el que fue mi compañero, ¡no supe cómo pedirle disculpas!).
En la clase de esta semana, Jack me hablaba de no evaluar sólo partidos o torneos aislados porque estaría mirando una fotografía, y que lo interesante es pensar en el largo plazo e intentar ver la película completa. Malos días tenemos todos, pero en términos de equipo (y de largo plazo), hay que pensar las debilidades y fortalezas de cada integrante de modo que la estrategia de juego sea la adecuada para esa pareja (y que seguramente sea única, ya que no habrá dos parejas iguales).
Esta semana aprendí que, quien juega a la derecha (Drive) o a la izquierda (Revés) tienen funciones diferentes para el equipo (disculpen los padeleros profesionales por la magnitud de mi ignorancia), casi tan diferentes como la tienen un defensor central y un delantero en el fútbol. Y que hay ciertas características (o habilidades) que tienen que tener los jugadores que juegan en cada posición, que incluso deberán ser entrenadas para esconder falencias y resaltar puntos fuertes.
Por las características individuales, seguramente Messi no se distinguiría demasiado jugando de 6, ni el Cholo Simeone hubiese tenido el éxito que tuvo jugando de wing derecho, mas allá de los enormes talentos con los que nacieron. Aún si fuera necesario por alguna circunstancia que el entrenador obligue a jugar a Messi de defensor, él tendrá que cambiar su forma de juego ya que el estilo con el que juega de 10 no puede mantenerse en el área propia y traería grandes problemas al Barcelona.
Por eso, si me toca jugar de un lado o del otro de la cancha de Padel, no puedo jugar de la misma manera, tengo que cambiar mi estilo de juego si voy al Drive o al Revés.
Esto hace del Padel un deporte simple y complejo al mismo tiempo. Simple porque sólo 2 se tienen que poner de acuerdo para armar una estrategia e implementarla, complejo porque de no hacerlo, la mitad del equipo va a estar jugando un partido diferente a la otra mitad.
Casi que una pareja de Padel es como un matrimonio, en el que hay que trabajar la comunicación, los tiempos de cada uno, los gustos, los horarios, y sobre todo, no descartar la posibilidad de que haya que probar 4 o 5 matrimonios hasta encontrar la felicidad. Lo bueno es que en los divorcios padeleros no perdemos una casa ni pasamos mensualidades.
Al ser un equipo de sólo dos personas, se hace más evidente la falla de uno de los integrantes, con que uno de los jugadores tenga un "mal día", el 50% del equipo va para atrás. (Y acá nacen las grandes discusiones y las excusas del tipo "perdí por culpa del muerto de mi compañero")
Por lo general, los deportes en equipo, suelen contar con varios integrantes, y si bien cada uno de los jugadores tiene un rol importante dentro del funcionamiento del todo, muchas veces el conjunto puede salvar un "mal día" individual.
Cuando jugaba al Voley tuve infinidad de días malos (de hecho, me cuesta recordar algún día bueno!), en los que el equipo me cubría, o el entrenador me sacaba de la cancha por un rato para evitar exponerme en alguna posición de la cancha y volverme a poner con otra rotación.
Este domingo me anoté nuevamente en un Torneo de Padel de 7ma (sigo sin encontrar alguno de 8va). Con el mismo resultado que el torneo de la semana pasada (ver Episodio 6), pero con el agravante de que tuve un pésimo día. Esos días en los que nada sale, en los que podría haber jugado con Paquito Navarro como compañero y aún así se iba a complicar ganar un game (encima jugaba por primera vez con el que fue mi compañero, ¡no supe cómo pedirle disculpas!).
En la clase de esta semana, Jack me hablaba de no evaluar sólo partidos o torneos aislados porque estaría mirando una fotografía, y que lo interesante es pensar en el largo plazo e intentar ver la película completa. Malos días tenemos todos, pero en términos de equipo (y de largo plazo), hay que pensar las debilidades y fortalezas de cada integrante de modo que la estrategia de juego sea la adecuada para esa pareja (y que seguramente sea única, ya que no habrá dos parejas iguales).
Esta semana aprendí que, quien juega a la derecha (Drive) o a la izquierda (Revés) tienen funciones diferentes para el equipo (disculpen los padeleros profesionales por la magnitud de mi ignorancia), casi tan diferentes como la tienen un defensor central y un delantero en el fútbol. Y que hay ciertas características (o habilidades) que tienen que tener los jugadores que juegan en cada posición, que incluso deberán ser entrenadas para esconder falencias y resaltar puntos fuertes.
Por las características individuales, seguramente Messi no se distinguiría demasiado jugando de 6, ni el Cholo Simeone hubiese tenido el éxito que tuvo jugando de wing derecho, mas allá de los enormes talentos con los que nacieron. Aún si fuera necesario por alguna circunstancia que el entrenador obligue a jugar a Messi de defensor, él tendrá que cambiar su forma de juego ya que el estilo con el que juega de 10 no puede mantenerse en el área propia y traería grandes problemas al Barcelona.
Por eso, si me toca jugar de un lado o del otro de la cancha de Padel, no puedo jugar de la misma manera, tengo que cambiar mi estilo de juego si voy al Drive o al Revés.
Esto hace del Padel un deporte simple y complejo al mismo tiempo. Simple porque sólo 2 se tienen que poner de acuerdo para armar una estrategia e implementarla, complejo porque de no hacerlo, la mitad del equipo va a estar jugando un partido diferente a la otra mitad.
Casi que una pareja de Padel es como un matrimonio, en el que hay que trabajar la comunicación, los tiempos de cada uno, los gustos, los horarios, y sobre todo, no descartar la posibilidad de que haya que probar 4 o 5 matrimonios hasta encontrar la felicidad. Lo bueno es que en los divorcios padeleros no perdemos una casa ni pasamos mensualidades.
No se si llamarle "falla" Juan, muchos organizadores lo hacen por un tema económico eso de no ser muy rigurosos.
ResponderBorrarSomos contemporáneos, quizá nos crucemos algún día en un rectángulo de allá o de acá. Abrazo!